Torta negra galesa
200 gramos de manteca blanda
½ taza de
azúcar
½ taza de
azúcar negra
2 huevos
1 ½ taza de
pasas de uva
½ taza de
frutas abrillantadas
½ taza de
nueces
1 copa de
coñac o ron
dos tazas de
harina
2
cucharaditas de polvo de hornear
2 cucharadas
de caramelo líquido
½ taza de
leche
Jugo y
ralladura de 1 limón
½
cucharadita de bicarbonato o especies para torta
Mezclar la
manteca blanda con los dos tipos de azúcar hasta que la preparación quede bien
cremosa.
Después
incorporar los huevos, las pasas, la fruta abrillantada, las nueces y el coñac
o ron. Mezclar con sumo cuidado.
A
continuación, tamizar sobre la preparación la harina mezclada con el polvo para
hornear. Mezclar lentamente.
Después,
incorporar, mientras se mezcla, el caramelo líquido, la leche, la ralladura, el
jugo de limón y el bicarbonato o las especies para torta.
Luego verter
la masa en un molde nº 26 enmantecado y enharinado.
Finalmente,
cocinar en horno moderado aproximadamente de 40 a 50 minutos.
Espárragos a la flamenca
(Ingredientes para 4 personas)
500 g de
espárragos
40 g de
mantequilla
Medio manojo
de perejil finamente picado
2 huevos
grandes
nuez moscada
Sal y
pimienta negra
Preparación
Cortar la
parte leñosa de los espárragos, lavarlos y llevarlos a ebullición en una olla
alta con abundante agua con sal donde se pueden cocer durante 10 minutos con
tapa, colocándolos en posición vertical y con las puntas fuera del agua.
Escurrirlos y pasarlos por agua fría.
Cocer los huevos por unos 8 minutos, luego pasarlos por agua fría para pelarlos mejor, triturarlos con un tenedor y agregar un poco de perejil picado, sal y pimienta. Derretir la mantequilla en una cacerola. Colocar los espárragos en una fuente para servir, sazonar con la mitad de la mantequilla derretida, distribuir los huevos picados por encima y luego el resto de la mantequilla; para terminar, agregar una buena pizca de nuez moscada.
Tarta de ricotta y cerezas
Esta exquisita preparación es uno de los tesoros de la gastronomía judía romana. En el siglo XVIII cambió su nombre por el de “Torta papale” o “Paplina” tras un edicto de 1775 en el que el Papa Pío VI prohibía a los judíos vender productos lácteos a los cristianos. Para escapar del control de los guardias del Papa, los pasteleros del gueto escondían el relleno de ricotta y cerezas negras entre dos capas de suave masa quebrada.
200 g de harina 00
65 g de azúcar glas
45 g de mantequilla derretida
1 huevo entero + 1 yema
1 cucharadita de levadura de
pastelería
1 pizca de sal
La cáscara de medio limón
Para el
relleno
500 g de queso ricotta
150 g de azúcar glas
400 g de mermelada de cereza ácida extra (o de cereza negra o de cereza)
Para la
decoración
20 g de azúcar glas
Preparar la masa
derritiendo la mantequilla en un cazo y dejándola enfriar. En un bol, batir el
huevo y la yema con el azúcar, añadir la levadura, la mantequilla derretida, la
ralladura de limón y una pizca de sal. Añadir poco a poco la harina, removiendo
con un tenedor. Hay que obtener una mezcla que se desprenda de las paredes pero
que no se pegue a las manos (si está demasiado blanda y pegajosa, añadir un
poco de harina; si está demasiado seca, añadir un poco de leche).
Pasar a una superficie enharinada y amasar brevemente. Formar una bola, envolverla en film transparente y dejarla reposar en la nevera durante 2 horas.
Extender unos dos tercios de la masa quebrada en un molde forrado con papel de horno; los bordes del molde deben estar cubiertos con masa quebrada.
Verter la mermelada de guindas (o mermelada de cereza) sobre la base y nivelarla.
Preparar el relleno: en un bol, mezclar rápidamente con un tenedor el queso ricotta con el azúcar, y verter sobre la mermelada de guindas.
Extender el resto de la masa quebrada formando un disco más pequeño para cubrir completamente el relleno; doblar los bordes.
Cocer en el horno precalentado a 180°C durante unos 50 minutos o hasta que la superficie esté un poco tostada.
Espolvorear con azúcar glas antes de servir.