Humita

Para muchas porciones, se calcula 1 lata de choclo por cada dos personas + 4 latas “para la olla”. Para dos porciones, con 2 latas es suficiente.
  
Poner en una cacerola:
choclo (1 lata en granos por cada 2 ó 3 de cremoso)
cebollas y puerros (que previamente se han picado y hervido un ratito en agua bien caliente para suavizar el sabor ácido)
trozos chicos de zapallo o coreanito previamente hervidos (o directamente puré de zapallo; hacia el final de la cocción, se habrá integrado todo)
cubo de caldito Knorr de verduras (la cantidad de cubitos dependerá de la cantidad de porciones; para una olla grande, con 2 cubitos está bien).

Si se desea se puede poner pimiento colorado y/o verde ( cortado bien chiquito y también previamente hervido hasta que esté blandito)

También se puede agregar un dientito de ajo, entero, apenas aplastado y sin pelar. Le da un sabor sutil -pero no gusto a ajo- a la preparación.

Agregar leche sólo hasta cubrir los ingredientes y que éstos “naden cómodamente” en una sopa espesa, pero no compacta.

Agregando un sobre de sopa crema de zapallo, se intensificará el sabor del zapallo hervido, y dará untuosidad a la mezcla.

Cocinar un rato a fuego vivo, revolviendo suavemente para que no se pegue. Cuando empieza a calentar, bajar el fuego al mínimo y revolver de tanto en tanto para que no se pegue. Mientras no se pegue al fondo (que da un sabor ahumado desagradable), no importa si hace algunas burbujas.

 Si se evapora mucho la leche, agregar más, hasta lograr la consistencia deseada. Un ratito antes de sacar del fuego, agregar 1 ó 2 cucharadas de maicena disuelta en un poquito de leche -fría para que no haga grumos-(puede ser también crema de leche, o ambas). Revolver bien y agregar más leche o más maicena si se prefiere menos o más espeso.
Como todos los ingredientes están cocinads al momento de poner en la olla- zapallo, cebollas, choclos, etc.-, la cocción es sólo para integrar los ingredientes e intensificar el sabor, por lo que no toma mucho tiempo.
Los cubos de caldo y la zopa crema de zapallo aportan suficiente sal, por lo que no es necesario agregar más. Pero si se desea, agregarla a la preparación a último momento, o poner saleros en la mesa para que cada comensal le ponga a gusto.
También se sugiere poner en la mesa saleritos con canela molida para que cada uno le agregue a su plato si lo prefiere. Le da un toque muy especial a la preparación, pero en cantidad mínima, porque es un sabor muy intenso.
Servir en cazuelas o platos hondos, decorado con queso rallado y/o perejil picado.
¡Glup!